Sí, es posible ser arrestado por conducir bajo la influencia del alcohol (DUI), no solo en función de tu nivel de alcohol en sangre (BAC), sino también basándose en la opinión y las observaciones del agente que te detiene. En la jurisprudencia reciente de Washington, los conductores han sido citados por DUI con niveles de BAC tan bajos como 0.05. Esto significa que incluso una cena casual, con una o dos copas, puede dejarte en un estado de deterioro.
Por supuesto, con leyes de DUI tan estrictas, es preferible no beber y conducir en absoluto. Sin embargo, si te detienen bajo sospecha de DUI, tus acciones pueden determinar si las observaciones del oficial llevan o no a tu arresto. Una vez que te hayan detenido, el oficial buscará signos como dificultad para hablar, torpeza al buscar tu licencia y otros indicadores. Si sales a cenar y tomar algo y decides conducir, tener estos documentos a mano es una forma de evitar observaciones negativas por parte del oficial.
Por eso debes mantener siempre una actitud respetuosa hacia el oficial y rechazar cortésmente cualquier prueba de sobriedad en el campo (FST) y la prueba de aliento portátil (PBT). Estas pruebas son voluntarias y, si decides someterte a ellas, los resultados pueden perjudicarte más que beneficiarte.